77 obras del autor: Durancamps - (Rafael Durancamps)

Clasificador

N° de obras
Ver todas

Siglo XIX. Realismo
- Dibujos y Grabados2
Siglo XIX. Impresionismo
- Paisajes y Vistas4
- Paisaje Urbano2
- Mar y Barcos3
- Costumbres5
- Cafés e Interiores2
- Retratos1
Siglos XIX y XX. Simbolismo
- Religión1
Siglos XIX y XX. Modernismo
- Paisajes y Vistas8
- Costumbres e Interiores16
- Espectáculos1
- Bodegones y Flores7
- Retratos8
- Desnudos2
- Religión2
- Bocetos y Dibujos7
- Varios3
Siglo XX. Vanguardias Históricas/Expresionismo
- Retratos1
Siglo XX. Vanguardias Históricas/Realismo
- Bodegones y Flores2

Apunte Biográfico

Sabadell, 1891 - Barcelona,1979

Hijo de una familia de industriales, fue prácticamente un autodidacta ya que sólo asistió a las clases nocturnas de la Escuela Industrial de Artes y Oficios de Sabadell con el maestro Joan Vila Cinca.

Su primera exposición tiene lugar en Barcelona en el año 1917 en las Galerías Layetanas con un conjunto de paisajes que denominó "Vibraciones". Cuando Joaquim Mir pasó una temporada en Mollet del Vallès, Durancamps estableció con él una estrecha relación y realizó algunas notas y telas que reflejan claramente la influencia del gran maestro. El éxito obtenido le animó y, tras pasar una temporada en Madrid, se trasladó a Italia para estudiar intensamente la obra de los grandes clásicos y de los modernos y en 1921 viaja a París donde conoce el panorama expositivo y el mundo de las galerías de esa ciudad. En cuanto regresó a su ciudad, participó en diversos certámenes, en los que obtuvo importantes premios como la Medalla Masriera y comienza a vender su obra a los más grandes y famosos coleccionistas. Es esta una etapa de acercamiento al impresionismo, pero también de influencia de Zurbarán, El Greco o el colorismo veneciano, conjugando la precisión en el dibujo, con la gravedad del color.

En 1926, regresa a Paris y se instala en Passy, ciudad en la que reside hasta 1939, y en la que conoce a Picasso, que le anima a efectuar exposiciones en la galería Zak, en las que obtuvo un considerable éxito, que fue cada vez fue mayor en las numerosas muestras que a partir de entonces siguió realizando como en “La Renaissance”, propiedad de Madame Pamaret.

En 1929, decoró ocho paneles en las Casas Consistoriales del Pueblo Español y expuso varias veces en la Sala Parés. Tras regresar a España, y se instala en San Sebastián donde, en 1939, efectúa una exposición. El mismo año volvió a exhibir sus obras en la Sala Parés de Barcelona, en la que no dejó de exponer hasta su muerte. Asimismo, realizó distintas exposiciones en Madrid, Sabadell, Bilbao, Londres y Filadelfia. Si bien su primera etapa estuvo influenciada por Mir, el pintor pronto evolucionó hacia una concepción más particular, dando especial preponderancia a la línea constructiva y a un peculiar colorido de sobria belleza. Sus naturalezas muertas, que trató con profusión de línea y transparencia, son un prodigio de serenidad y elegancia, con un sello tan personal que escapan a cualquier clasificación contemporánea. Sus paisajes y escenas costumbristas, especialmente las capeas en distintos pueblos españoles, son de gran emotividad. Los "cielos de presagio" que expresan el dramatismo de la fiesta evocan un agudo sentido del criterio. Sus obras están expuestas en diversos museos de Barcelona, Madrid y otras ciudades del mundo.