Clara Gangutia Elícegui nació en 1952 en San Sebastián. Su padre, Eugenio, procedía de La Rioja, su madre, Pepita, era también de San Sebastián. Pocos años más tarde se traslada la numerosa familia a Madrid. Con su padre, amante y coleccionista de arte (en su casa había grandes cuadros barrocos), Clara tuvo ocasión de conocer el arte de los museos de Madrid y también el arte y los paisajes de Castilla la Vieja.

Los veranos los pasaba en San Sebastián. Desde los 10 años empezó a estudiar pintura para entrar en la Academia de San Fernando, cosa que hizo en el curso 1968-69. Antonio López fue su profesor.

En 1970 hizo un viaje de aprendizaje a París, con los pintores Juan Manuel Contreras, colega de estudio y Roberto González. En 1971 un grupo de alumnos de S. Fernando “Jóvenes realistas” exponen en la Galería Seiquer.

En 1973 conoce al pintor Jesús Ibáñez, su futuro marido. Abandona la academia de San Fernando sin terminar los cursos. A pesar de ello accede a una estancia en la Academia de España en Roma, que, junto con otros compañeros, no terminaría por el ambiente convencional y rígido que existía en ella. Recorrió Italia y entonces aumentó su admiración por la pintura veneciana.

A su vuelta empieza una producción de paisajes urbanos madrileños. Participa en exposiciones colectivas y tiene su primer hijo. Tiene su otro hijo en 1986 que, con el resto de la familia, aparecerá frecuentemente en sus cuadros. Sus temas se ampliarán con otros viajes a Italia, Argentina, Uruguay y Escocia, donde, en 1990, participa en una exposición de “Realistas españoles de los 90”. Hasta la fecha no deja de exponer (antológica en el Centro Conde Duque de Madrid en 2000) y sus obras se hallan repartidas por España, Europa y América.