129 obras del autor: Vicente - (Eduardo Vicente)
Clasificador |
N° de obras |
Siglo XX. Vanguardias Históricas/Realismo | |
- Paisaje Urbano | 1 |
- Retratos | 1 |
- Protesta Social | 1 |
Pendiente de clasificar | |
- Varios | 126 |
Apunte Biográfico |
Madrid. (1909-1968)
En los años grises y sombríos de la postguerra española brillaba con luz tenue y delicados matices la obra pictorica de Eduardo Vicente. Nacido en Madrid, en el año 1909, al acabarse la contienda tenia exactamente treinta años. En plena juventud y con entera posesión de sus medios expresivos, contaba ya con una intensa experiencia artlstica, adquirida al lado de su hermano Esteban, tambien pintor, cuya vida y obra posterior estaría ligada a Norteamerica. Eduardo Vicente, que con anterioridad a la Guerra Civil había colaborado, como copista, con el Museo Ambulante de Misiones Pedagogicas, que había sido creado para mostrar por los pueblos y las aldeas de la Península copias facsímiles de las obras mas representativas del arte español ,el mismo se encargo de hacer las reproducciones de las Pinturas Negras de Goya ya que había vivido el ambiente intelectual de las vanguardias históricas en los años veinte y treinta, pertenecía al lado liberal de las dos Españas. Combatiente del ejercito republicano, al triunfar los "nacionales" era un perdedor, un vencido. Para poder sobrevivir se vio obligado entonces a realizar trabajos de pintura industrial de brocha gorda. Pero muy pronto su buena estrella y circunstancias favorables hicieron que, pese al exilio interior, pudiese salir adelante. Su amistad con Jose María de Cossío, que le introdujo en la Editorial Espasa-Calpe y sobre todo el descubrimiento de su pintura por Don Eugenio D'Ors, que le puso en contacto con el galerista Aurelio Biosca y en 1944 le encargo el cartel para el Salon de los Once en la academia Breve de Crítica de arte, hicieron que Eduardo Vicente volviese a empezar su interrumpida carrera creadora. A partir de entonces se inicio su camino ascendente hacia la fama hasta lograr el cenit del exito al cual podía entonces aspirar un artista. Amigo de escritores, de poetas, libreros e intelectuales, asiduo de las tertulias del cafe Gijon, Eduardo Vicente se convirtio en un pintor admirado y elogiado por las personas mas cultas de la epoca. En el panorama de la pintura madrileña de la postguerra -Manuel Sánchez Camargo, en 1954 lo incluía en su libro Pintura española contemporanea. En la escuela de Madrid ocupa un singular puesto. Junto con Benjamín Palencia, Rafael Zabaleta, Ortega Muñoz, Pancho Cossío y Díaz Caneja, su nombre figura hoy en el primer plano artístico del momento. Nombrado en 1951 miembro del Jurado de la Primera Bienal Hispanoamericana del Arte e invitado a la Bienal de Venecia, su arte se alineaba dentro de las tendencias consideradas entonces renovadoras de la plastica española. Ahora bien, a partir de 1957, con la aparicion de "El Paso", del Informalismo, del "Arte Otro", el Pop y demas movimientos de vanguardia, Eduardo Vicente pasó a formar parte de un pasado que para los artistas jovenes estaba totalmente obsoleto. Con su muerte relativamente temprana -todavla no había cumplido los sesenta años desaparecio discreta y silenciosamente de la escena. En la primavera del año 1968, cuando en Madrid se celebran las Fiestas de San Isidro y cuando iba a abrirse una exposicion de su obra en la Galeria Quixote, fallecio repentina e inesperadamente. Sus amigos, inquietos al no verle durante varios días, descubrieron su cuerpo sin vida acurrucado en un rincon de su estudio como si la muerte le hubiese sorprendido en un primer sueño.Era el 9 de Mayo de 1968 y su cuerpo no fué descubierto hasta 3 días más tarde. |